Pero hoy no he venido por mi... lo he hecho por Monaguillo, de la Parroquia 2.0... hay una quedada via parroquianos, promovida por Evgar que, para celebrar los 1000 seguidores, le queremos rendir un homenaje publicando esta receta...
Quiero decir que el texto lo voy a publicar directamente copiado del blog de Monaguillo, pero la foto es mía.
Probé esta receta en San Valentín, en una cena que hice así como romántica...a mi me encantó, es una mezcla de sabores un poco extraña, que en un principio da cosilla, pero hay que ser valiente, desde luego no deja indiferente... se la tengo prometida a mis amigos para la próxima cena que haga en mi casa... seguro que les gusta...
Esta es la receta original de David Monaguillo de la Parroquia 2.0
Ingredientes:
4 Fresas de tamaño medio
8 anchoas en conserva (de calidad)
una cucharada de aceite de las anchoas
un chorrito de leche de leche condensada ( otra cucharada aprox)
Menta/cebollino ( la foto no lo lleva, no os pongáis bizcos buscándolo)
Ralladura de lima.
//** una cucharada de postre de leche de coco espesa ( opcional)
//** una cucharada de postre de leche de coco espesa ( opcional)
Picamos las anchoas en trozos pequeños y las ponemos en un recipiente.
Le añadimos un poco de su aceite , la leche condensada , la ralladura de lima ( poca) y un pelín de menta/ cebollino.
Integramos todo muy bien hasta que se forme una especie de "masa" de hamburguesas.
Cortamos la punta de las fresas para que luego podamos apoyarlas con facilidad.El resto de la fresa la partimos mas o menos a la mitad ( dejad las hojas, porque quedan chulas) y de esa forma ya tendremos los dos "panes" de fresa.
Ponemos una cucharadita del relleno encima de uno de los trozos de fresa ( el que no tiene las hojas) y con la ayuda de la cuchara rectificamos los bordes.
Colocamos encima la otra parte de la fresa y si queremos darle un rollo san valentinero , le clavamos uno de esos palillos "modernos" ligeramente inclinado.... ( para los solteros como yo, las dejáis así... :D )
Si nos queda un poco de jugo en el recipiente donde hicimos la mezcla de las anchoas genial, en caso contrario volvemos a poner una cucharada de aceite de las anchoas , otra de leche condensada y mezclamos bien.
Servimos un poco de esa "condenseta" en la base del plato y colocamos la fresamburguesa encima.
Acidez de la fresa ----> rectificado con la leche condensada.
Toque dulzón de la leche condensada ----> se lo come el salado de la anchoa.
Sorprendente, ¿verdad?...
Ahí va mi homenaje... de una de tus parroquianas